jueves, 21 de octubre de 2010

¡Las tórtolas renuevan todas las plumas!

(Plumas de la cola de Junior)


En un programa de TV, hace algún tiempo, vi cómo un águila a la que se le había roto una pluma de la cola era ayudada con la cuidadosa recomposición de la misma. Fue algo muy complicado, hubo que introducir un eje de metal en su interior, añadir parte de otra pluma, pegarlas las dos partes, reimplantar la pluma... y de ahí llegué a la conclusión de que esas plumas de la cola posiblemente no se renovaban.

Por supuesto el plumón resulta evidente que se cambia a menudo pero, ¿qué pasa con las plumas largas de las alas, y sobre todo de la cola? Hay que decir que empecé a notar cómo se les deterioraban, especialmente a Junior y Walter, es decir, las tórtolas blancas. Últimamente incluso se les caían, se les partían... las puntas estaban hechas una pena. Pero, con gran alegría, he notado que las tórtolas sí renuevan las plumas de la cola, y a semejanza de un cabello que creciera desde la raíz, tras la pérdida de una pluma otra viene pronto a sustituirla.

En la foto se nota perfectamente la diferencia entre las plumas viejas, más largas, con la punta oscura y deterioradas, y las nuevas, en una capa superior y totalmente blancas.

domingo, 17 de octubre de 2010

Amores de otoño

(Amélie y Walter acicalándose las plumas mutuamente)


Tras dos semanas empollando unos huevos infértiles, que procedían de Junior, finalmente Walter y Amélie se dieron perfecta cuenta de que no tenía sentido continuar con tan inútil tarea, así que comenzaron a cortejarse y darse mimos. En estas ocasiones da gusto verlos, tan cariñosos. Hay varios movimientos típicos de estos momentos, entre ellos el acicalamiento mutuo, consistente en el rápido repaso de las plumas del cuello, que realizan con una enorme habilidad; la foto superior da idea de ello, ya que está movida en la parte de las cabezas, pero creo que da una buena idea de en qué consiste.

Lamentablemente cuando aparezco con la cámara para grabar suelen interrumpir lo que hacen y me prestan atención, por lo que no es fácil captar su comportamiento. El vídeo final es ilustrativo, pero Walter solo canta un par de veces, cuando lo normal es que lo haga de modo constante mientras corteja a Amélie; corto la grabación justo antes de que Amélie se me suba encima de un salto.